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Clases de precisión OIML: ¿qué célula de carga es la correcta para cada aplicación?

Las necesidades de precisión de las células de carga dependen del trabajo al que se destinen. Por ejemplo, cuando se pesan materiales de construcción, como cemento o grava, rara vez se requiere una precisión de gramos; basta con una precisión mucho menor que la de la báscula de un comercio, e inmensamente menor que la que exige a un sistema de dosificación destinado a pesar gramos o microgramos con gran exactitud.

Las clases de precisión según la norma OIML R60, aceptada a escala internacional, ofrecen una información muy valiosa a la hora de elegir la célula de carga adecuada para cada aplicación concreta. Todas las células de carga de HBM han sido clasificadas y probadas con arreglo a la norma OIML R60.

Las células de carga de HBM emplean tecnología de galgas extensométricas y resultan muy atractivas por su precio, larga vida útil y precisión. Además requieren poco espacio de montaje y son fáciles de instalar.

HBM ofrece principalmente células de carga con clases de precisión C3, C3MR y C6. Estas células cumplen especificaciones muy concretas en lo que respecta a varios factores que son de vital importancia para la calidad del resultado de la medición. Por ejemplo, la linealidad y la dependencia con la temperatura.

¿Qué clase de precisión necesito para mi aplicación?

A continuación encontrará recomendaciones sobre las clases de precisión y su idoneidad para distintas aplicaciones. En general, existe una tendencia generalizada hacia una precisión cada vez mayor. HBM ya ofrece células de carga de alta precisión C6. Las células de carga de clase C6 ofrecen excelentes prestaciones y son muy adecuadas para el desarrollo de nuevos conceptos en balanzas y básculas de control de alta precisión.

Además, no hemos dejado de mejorar la precisión de nuestras células de carga hasta niveles que, hace poco, parecían imposibles de alcanzar con la tecnología de galgas extensométricas. Esto abre numerosas nuevas oportunidades de innovación en productos y actividades de pesaje, sobre todo si tenemos en cuenta que las células de carga de galgas extensométricas tienen precios considerablemente inferiores a los de las células por compensación de fuerzas electromagnéticas que se utilizan habitualmente. Si desea más información, no dude en contactarnos.

Aplicaciones típicas

La necesidad de una célula de carga con una clase de precisión u otra depende de la aplicación. El diagrama de más abajo ofrece una visión global de las aplicaciones más comunes. Las clases de precisión aparecen ordenadas de menor a mayor.

Las células de carga con precisión más baja, pertenecientes a las clases D1 a C2, son más que suficientes para las básculas sencillas de materiales de construcción que se emplean para pesar arena, cemento o agua.

Ahora bien, otra cosa muy distinta es añadir la proporción correcta de aditivos a los materiales de construcción. Para ello existen básculas para materiales de construcción especiales con células de precisión C3, que sirven para mezclar aditivos tales como cenizas o arena. 

Las células de precisión C3 también se utilizan con frecuencia en la construcción de maquinaria. En este tipo de aplicaciones, las básculas son un elemento del proceso de garantía la calidad y se utilizan, por ejemplo, para verificar rodamientos de bolas.

Sin embargo, en el caso de las básculas de mostrador o las básculas de las máquinas de llenado se necesita más precisión. En estas aplicaciones se pesan gramos e incluso microgramos. Las células de carga adecuadas para estas aplicaciones deben tener clases de precisión de C3 a C6.

En la actualidad, las células de carga integradas en básculas de mostrador especiales o también en básculas de control ofrecen la más alta precisión: la clase C6. Estas básculas de control eminentemente dinámicas permiten controlar procesos de producción con gran exactitud, en función de criterios de peso. El envasado de alimentos es una de sus aplicaciones más habituales.