Los materiales compuestos o composites reforzados con fibra de vidrio constan de al menos dos materiales diferenciables a escala macroscópica, que se combinan con el propósito de mejorar las propiedades generales. Normalmente se integra una estructura de fibra en una resina (material matriz) que posteriormente se polimeriza.
Las fibras o haces de fibras se procesan formando un material textil o tejido. La mayoría de los métodos de producción de tejidos a partir de fibras proceden de la industria textil. En consecuencia, la mayor parte de la terminología empleada en este campo también se utiliza cuando hablamos del procesamiento de fibras de refuerzo en materiales textiles. Las fibras determinan la fuerza y rigidez del material compuesto. Los materiales en los que se integran fibras alineadas son mucho más fuertes en la dirección de la fibra que los materiales que no llevan fibras. El aumento de la rigidez es menos pronunciado cuando se ejerce fuerza en sentido perpendicular a la orientación de las fibras. La fuerza en esta dirección es menor porque las fibras actúan como concentradores de la tensión. En la práctica, con frecuencia se integran fibras alineadas en distintas direcciones.
Se pueden aplicar múltiples diseños*:
Fibras unidireccionales Fibras bidireccionales Fibras cortas
El gráfico a continuación muestra la contribución de las fibras a la resistencia de un material compuesto: