Los resultados de la investigación podrían traducirse en una nueva tecnología de guiado de la forma de endoscopios
El grupo de investigación sobre ingeniería biomecánica de la Universidad Tecnológica de Delft (Países Bajos) ha empleado un sensor de fuerza de HBM en sus investigaciones de la fricción entre cables de acero y distintos tipos de caucho. A primera vista puede parecer un campo de investigación marginal, pero el caso es que los hallazgos podrían materializarse en nuevas tecnologías de guiado de la forma de endoscopios flexibles (mangueras flexibles de gran longitud con una cámara en el extremo). Existe potencial para obtener importantes ahorros en el sector sanitario. A corto plazo, esta tecnología también se podría aplicar a determinadas aplicaciones policiales y de defensa, como la detección de explosivos o el reconocimiento de espacios confinados.
Transductores de fuerza de HBM
El estudio de la fricción entre cables de acero y caucho formaba parte de la tesis doctoral de Arjo Loeve, que actualmente es investigador postdoctoral. Aquel estudio estaba dirigido al desarrollo de una nueva tecnología de guiado de la forma de los endoscopios que se utilizan para hacer pruebas médicas en pacientes humanos. Durante la inserción de un endoscopio flexible se pueden producir pliegues indeseables en la manguera, con efectos tales como estiramientos dolorosos una vez dentro del intestino del paciente. En el peor de los casos, se pueden producir complicaciones, como la perforación del intestino durante una colonoscopia. Algunos fabricantes ya han introducido tecnologías de guiado de la forma de los endoscopios, pero su funcionamiento es mejorable y resultan extremadamente caros. La mayoría de los endoscopios no cuenta con sistema de guiado de la forma y solo permiten corregir la forma de la manguera de manera limitada.