Existen muchas maneras de medir el par. Una forma de garantizar la trazabilidad consiste en utilizar un transductor de par calibrado de fábrica con una precisión determinada, asociada a una cadena de comparaciones ininterrumpida y documentada que relacione el transductor de par con un patrón primario.
En el campo de los motores marinos, las mediciones de precisión son indispensables para determinar la eficiencia y, en consecuencia, para cumplir las estrictas normas medioambientales que se aplican a estos equipos navales. La optimización de motores marinos con ayuda de mediciones de par altamente precisas y fiables abre la puerta a un ahorro energético considerable. Además, permite seguir el ritmo de la normativa internacional, que plantea requisitos cada vez más exigentes a los motores marinos con un elevado par nominal [1].
La potencia motriz se puede calcular de manera sencilla si se conoce con precisión el par Ϻ entre el generador y el lado de impulsión del mecanismo giratorio, y la velocidad angular ω. La relación viene dada por la fórmula (1):
Una medición de par exacta hace posible un control preciso del sistema de accionamiento mecánico. Eso, a su vez, permite controlar los motores de combustión (por ejemplo, motores multicombustible o de gas) y garantizar que funcionen al régimen óptimo, lo cual contribuye a evitar problemas de detonación, fallos de encendido o sobrecarga, al tiempo que se reduce el consumo de combustible [1].