Ciclo de pruebas del aerogenerador flotante
La temperatura media del agua del mar frente a las costas de la isla japonesa de Kurahashi es de 10 °C. Allí, en plena bahía de Hiroshima, aerodyn engineering está haciendo ensayos con un aerogenerador flotante que se alinea con la dirección del viento por sí solo. Tres delgados flotadores se encargan de mantener a flote la estructura, que tiene un peso total de 3 toneladas. La torre mide 8 m de altura y el rotor tiene dos palas, con una envergadura de 16 metros.
“En condiciones de viento favorables, el aerogenerador desarrolla una potencia de 5 kilovatios. Sin embargo, esto es solo un modelo a escala 1:10. El aerogenerador a tamaño real pesará en torno a 3000 toneladas y producirá hasta 6 megavatios de potencia”, Martin Bode, ingeniero jefe de aerodyn engineering. Para estabilizar el aerogenerador en su posición se utilizan seis cables de acero sujetos a otros tantos puntos de anclaje en el lecho marino. La articulación giratoria, en la que confluyen todos los cables de anclaje, se encarga de alinear el aerogenerador con respecto a la dirección del viento. Durante las pruebas, es importante determinar la tensión a la que está sometido el sistema de anclaje del aerogenerador. “Los anclajes de este aerogenerador deben ser capaces de soportar condiciones extremadamente duras —y a largo plazo—, tales como tormentas fuertes o mar muy gruesa. Por eso, es esencial que en nuestras medidas utilicemos células de carga extremadamente robustas, que puedan permanecer bajo el agua durante varios meses”, insiste Martin Bode. Asimismo, los sensores deben proporcionar resultados muy precisos y detallados, para que a partir del modelo a escala sea posible derivar datos fiables, válidos para el aerogenerador de tamaño real.
“Necesitamos equipos de pruebas y medición fiables para los complejos ensayos de nuestro nuevo aerogenerador marino. Las células de carga S9M nos suministran datos fiables y muy precisos acerca de las cargas de tracción que soporta nuestro sistema de anclaje, incluso con condiciones del mar extremadamente duras”. — Martin Bode, ingeniero jefe de aerodyn engineering.